Entdecke DE: la “quema del biike” en Frisia del Norte
La serie “Entdecke DE” invita a descubrir los lugares más fascinantes de Alemania. Esta vez presentamos la tradicional “quema del biike” en Frisia del Norte.
Cuando llamas consumen una parte del Patrimonio Inmaterial de la Humanidad de la UNESCO, solo puede tratarse de la “quema del biike” en Frisia del Norte. En la noche del 21 de febrero son quemados más de 60 “biikes” en las islas de Sylt, Amrum y Föhr y a lo largo de la costa de Frisia del Norte. “Biike” es la palabra frisona para designar una baliza, una señal luminosa. Bomberos apilan en las playas enormes montones de madera y ramas secas. A veces se coloca un muñeco de paja encima, llamado “Pider” o “Petermännchen”, como símbolo del invierno, que hay que ahuyentar. Luego del llamado “¡Tjen di Biiki ön!” (“¡Quemad el biiki!”), los fuegos comienzan a verse desde lejos. A menudo son pronunciados también ardientes discursos en frisón, por ejemplo, sobre acontecimientos políticos de actualidad. Luego los concurrentes van a menudo a comer juntos col rizada.
La “quema del biike”, incluida en la lista del Patrimonio Cultural Inmaterial de la UNESCO
La UNESCO incluyó la “quema del biike” en la lista del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad en diciembre de 2014, con el objetivo de conservar esa tradición para las próximas generaciones. La práctica del ritual de fuego puede seguirse atrás en el tiempo hasta el año 1740, sus raíces son incluso anteriores. Como informan cronistas, en el siglo XVIII, marineros se reunían todos los 22 de febrero para hablar sobre su partida hacia los grandes puertos y firmar contratos de trabajo para la próxima temporada de pesca. De ello surgió alrededor de 1830 la tradición de las mujeres de despedir con fogatas a sus esposos, que salían a la caza de ballenas. A fines del siglo XIX se fijó el 21 de febrero como día de la Fiesta Nacional de Frisia del Norte. Ese fue el comienzo de la tradición moderna del “biike”. Nueva vida recobró el ritual del fuego en los años 1970, debido a un renacimiento de las tradiciones regionales en Frisia del Norte. Hoy atrae todos los años a numerosos visitantes a la región.