Sarrebruck: un centro en la frontera
En la serie de deutschland.de “Mi ciudad”, alcaldes de ciudades dan información y consejos de primera mano. Parte 32: la primera alcaldesa de Sarrebruck, Charlotte Britz.
Sra. Britz, ¿qué caracteriza a su ciudad?
La capital del estado de Sarrebruck combina su idílica ubicación con el singular encanto de la región fronteriza. Es una ciudad en la que rápidamente se llega a todos lados. En Sarrebruck hay excelentes restaurantes, grandes centros de compras y exclusivas boutiques, excelentes teatros y festivales. También puede gozarse simplemente de un café en la plaza St. Johanner Markt. Además, Sarrebruck es el centro de la región Saar-Lor-Lux. Aquí tienen su sede instituciones políticas y medios de comunicación, aquí viven y trabajan numerosos seres humanos. Otra característica singular en nuestra ciudad en el Sarre es su gran escena creativa joven.
¿Qué ve cuando mira a través de la ventana de su oficina?
La iglesia de San Juan. Fue construida en estilo neogótico y casi no sufrió daños durante la Segunda Guerra Mundial. En la iglesia no solo se celebran misas, sino también eventos culturales. Desde mi ventana veo además los arreglos florales en la Plaza del Ayuntamiento, realizados por nuestro personal. Además, delante del Ayuntamiento se halla una estación del Ferrocarril del Sarre, que también une a Alemania con Francia.
¿Cuál es su lugar preferido en la ciudad?
En la plaza St. Johanner Markt, en el corazón de la ciudad. Por sus cantinas, boutiques, restaurantes y bistrós, algunos habitantes de Sarrebruck la llaman su “sala de estar”. Cuando brilla el sol, la plaza rebosa de vida: es EL PUNTO DE ENCUENTRO en Sarrebruck.
¿A qué personalidad de su ciudad estima más?
No quisiera mencionar solo a una persona. Estimo a todos los habitantes de mi ciudad que realizan trabajo voluntario en numerosas áreas y ayudan a que sea una ciudad tolerante y humana: representan la internacionalidad de Sarrebruck.
¿Qué lugar debería ver imprescindiblemente un visitante?
La naturaleza alrededor de nuestra ciudad, por ejemplo la ruta de senderismo Brunnenweg en el valle Ensheimer Gelösch, de primera categoría, que une entre sí once manantiales. En esa ruta puede disfrutarse con calma de un muy hermoso paisaje.
¿Dónde puede conocerse mejor a los habitantes de su ciudad?
Los numerosos cafés y cantinas, por ejemplo en el barrio de Nauwiese, son lugares ideales para entablar contactos. Pero también cuando se va de compras en el casco antiguo se entra en contacto con personas que atienden y dan consejos amablemente a los clientes. También vale la pena ir a las grandes fiestas de verano: solo el Espectáculo del Sarre atrae todos los años a 280.000 visitantes. Muy interesante para los amantes del cine es el gran festival para directores jóvenes en enero, en el que se otorga el premio “Max Ophül”: durante una semana, la ciudad se llena de jóvenes cinéfilos.
¿Dónde le gusta pasar sus vacaciones?
Me gustan mucho las islas. Allí, ante la infinitud del horizonte marino puede reflexionarse profundamente sin caer en distracciones.
