Del avance científico al éxito comercial
Las universidades e institutos de investigación alemanes gozan de una excelente reputación en todo el mundo, al igual que sus spin-offs. Tres ejemplos.
Las start-ups alemanas, como el fabricante de aviones Volocopter o el software lingüístico DeepL, son conocidas en todo el mundo. Estos son solo dos ejemplos destacados entre las cientos de empresas emergentes alemanas que han alcanzado el éxito. Muchas de ellas son empresas derivadas o Spinoffs de universidades o grandes institutos de investigación alemanes, como Max Planck, Fraunhofer, Leibniz o Helmholtz. Varias de estas empresas han logrado convertirse en “unicornios” en pocos años, es decir, han alcanzado una valoración superior a los mil millones de dólares. La Universidad Técnica de Múnich (TUM), que ha “alumbrado” nueve unicornios, no sólo es líder entre las universidades en lo que se refiere a empresas derivadas. Tres ejemplos de start-ups exitosas:
TUM: Synthesia crea vídeos con IA
La spin-off del profesor Matthias Nießner de la TUM, en colaboración con la científica londinense Lourdes Agapito y dos empresarios, desarrolla un software capaz de crear vídeos sorprendentemente realistas, utilizados, por ejemplo, para contenido didáctico. Según Synthesia, lo más importante es prevenir la creación de deepfakes, es decir, vídeos falsos que muestran a personas reales. Fundada en 2017, Synthesia 2023 ya ha alcanzado el estatus de unicornio.
TU Chemnitz: Staffbase permite a los empleados comunicarse
Martin Böhringer y Lutz Gerlach se conocían de la época en que trabajaban en la Universidad Politécnica de Chemnitz. Ambos ya habían incursionado en el mundo de las start-ups cuando conocieron a Frank Wolf, lo que dio origen a la idea de Staffbase. Staffbase es una aplicación diseñada para facilitar la comunicación interna en empresas de todos los tamaños, una herramienta más necesaria que nunca en la era del trabajo remoto y móvil. Esto también se refleja en el éxito de la empresa: fundada en 2014, alcanzó el estatus un unicornio en 2022.
DLR: Agile Robots controla robots
Esta empresa muniquesa, una spin-off del Centro Aeroespacial Alemán (DLR), desarrolla software para controlar robots (industriales) y también robots propiamente dichos. Su gran objetivo: combinar la inteligencia artificial y las tecnologías robóticas. Los investigadores del Instituto de Robótica y Mecatrónica del DLR, Zhaopeng Chen y Peter Meusel, fundaron Agile Robots en 2018, y la empresa ya está considerada un unicornio.