Tres tendencias principales en 2021
¿Qué se mueve en Alemania y Europa? Presentamos tres tendencias que se acelerarán en el nuevo año.
Qué temas, aparte del coronavirus, determinarán el nuevo año 2021, qué tendencias continuarán e incluso se intensificarán. Presentamos tres tendencias entre ellas.
Tendencia 1: Hidrógeno verde
El Gobierno alemán apuesta por el hidrógeno para la producción de energía sostenible. La Estrategia Nacional de Hidrógeno tiene por objeto incorporar al mercado el hidrógeno verde y posibilitar su producción industrial, transportabilidad y explotación. ¿Por qué es importante esto? Las energías procedentes de la producción sostenible, como la energía eólica o solar, son difíciles de almacenar. El hidrógeno es una fuente de energía fácil de transportar. Puede utilizarse también como combustible en el transporte y la industria. Es importante que se produzca de manera sostenible, es decir, que se disponga de agua y energía solar o eólica en cantidades suficientes para la electrólisis. Por esta razón, el Gobierno alemán se centra en colaboraciones estratégicas con países del sur y oeste de África, así como con Australia
Tendencia 2: Suburbanización
Cada vez más habitantes de las grandes ciudades en Alemania se mudan a los suburbios o piensan hacerlo. Además de la idea romántica de una vida cercana a la naturaleza, los altos alquileres en las grandes ciudades alemanas desempeñan un papel particularmente importante en estas consideraciones. Las mejores conexiones a Internet y la creciente disposición de las empresas a permitir a gran escala el teletrabajo desde la pandemia del coronavirus refuerzan aún más esta tendencia, que se puede observar desde 2014. Suburbanización es el término técnico utilizado por el Instituto Federal de Investigación Demográfica. La gran ciudad sigue creciendo, pero solo por la afluencia de migrantes, sobre todo jóvenes. En los demás casos el movimiento migratorio actual es el éxodo a los suburbios.
Tendencia 3: Confianza en el Estado
Menos tangible que las otras tendencias, pero una consecuencia importante de la pandemia del coronavirus, es la mayor la confianza en el Estado y sus instituciones. No solo en Alemania la gente percibe la importancia de las instituciones nacionales y también internacionales durante la crisis. Son las que apoyan a quienes necesitan ayuda, establecen normas contra la propagación incontrolada de la enfermedad, promueven la investigación de fármacos, aseguran la atención de la salud y apoyan a empleados y empresas especialmente afectados. Durante la crisis, muchos europeos notan en carne propia lo importante y útil que es la Unión Europea para su vida cotidiana.
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