Los rostros de los Juegos Olímpicos
Seis atletas olímpicos alemanes que hay que conocer.
Unos 430 deportistas de alto rendimiento compiten en los Juegos Olímpicos de Tokio. Presentamos a seis de los muchos excepcionales atletas de diversas disciplinas.
Skateboard: Lilly Stoephasius
La participante olímpica más joven de Alemania tiene solo 14 años: Lilly Stoephasius, de Berlín, pertenece al círculo de primera categoría internacional del skateboarding. La adolescente ganó la medalla de bronce en los Campeonatos del Mundo de 2019 y la de plata en los Campeonatos de Europa del mismo año. Stoephasius compite en la disciplina “park”, que consiste en dar saltos en una especie de bañera de hormigón. A un skateboard se subió ya antes de empezar a caminar. Entrenada es hasta hoy por su padre. Su familia también viaja con ella a las competiciones. A pesar del esfuerzo, “competir es muy divertido”, dice la joven atleta, que espera que su participación en los Juegos Olímpicos sea también un impulso para otras skateboarders femeninas, porque “hasta ahora hemos recibido menos dinero de los patrocinadores y en las competiciones que los atletas masculinos”.
Boxeo: Ammar Riad Abduljabbar
Sólo tres atletas –una mujer y dos hombres– conforman el equipo alemán en esta disciplina. Ammar Riad Abduljabbar ha peleado por su pasaje a Tokio en todos los sentidos. A los 15 años llegó de Irak a Hamburgo con su padre. En Irak ya había contribuido con diversos trabajos al presupuesto familiar. Pudo permitirse sus primeros guantes de boxeo solo con la ayuda de un tío. “Los compré de segunda mano y los llevé con orgullo a los entrenamientos en mi primer club, el HBC Heros”, dice. En el cuadrilátero, este peso pesado de 25 años se caracteriza por una gran ambición y una indomable voluntad, también en el combate decisivo de clasificación para los Juegos Olímpicos, en el que derrotó a un rival de mayor talla.
Ciclismo de pista: Theo Reinhardt
Solo siete kilos pesa la bicicleta de sprint de Theo Reinhardt, con la que compite por medallas en el ciclismo de pista en las categorías de persecución por equipos y madison. Este berlinés de 30 años corre a velocidades de hasta 70 kilómetros por hora y su potencia de pedaleada llega hasta los 1.000 vatios. A modo de comparación: en los exámenes cardiacos, las generación de más de 150 vatios se considera ya un rendimiento deportivo. En 2018, Reinhardt se convirtió sorprendentemente en campeón del mundo en la disciplina madison. Desde entonces, ha mejorado su técnica y aprendido nuevas tácticas. En Tokio quiere demostrar que puede medirse exitosamente con los competidores de otros países.
Tiro deportivo: Monika Karsch
Monika Karsch, de 38 años, de Schongau (Baviera), competirá en las disciplinas de pistola de aire comprimido y pistola deportiva. Esta enfermera de formación es desde hace 16 años soldado deportista, con el rango de sargenta mayor. Aunque Karsch se pregunta qué sentido tienen los Juegos Olímpicos en medio de la pandemia del coronavirus, dice: “creo que allí reinará el espíritu olímpico y estoy casi más emocionada que antes de Río de Janeiro". Sobre todo porque muchas de sus competidoras por las medallas son ahora casi como amigas: todas se conocen en la pequeña comunidad internacional de tiradoras deportivas. Karsch quiere disfrutar de los Juegos Olímpicos “porque es bonito volver a experimentar la atmósfera de competición”.
Lanzamiento de disco: Daniel Jasinski
Es un gigante, tanto en su disciplina como físicamente: 2,07 metros de altura, 125 kilos: Daniel Jasinski, lanzador de disco, de Bochum. Jasinski, de 31 años, ganó sorpresivamente la medalla de bronce en Río de Janeiro hace cinco años. Pero su éxito pasó algo poco desapercibido, porque Christoph Harting ganó la de oro para Alemania en la misma prueba. Harting no participa esta vez, pero sí Jasinski, con sus discos: suele usar dos, uno amarillo y uno negro, uno con un borde más áspero. “Suelo lanzar ambos y luego decido cuál usar, dependiendo de qué sensación tenga ese día: ello desempeña un importante papel”.
Hockey: Lena Micheel
Lena Micheel es integrante de la selección nacional alemana femenina de hockey sobre césped. Esta joven de 23 años ha jugado ya más de 70 partidos con la selección y fue vicecampeona de Europa. Aprendió a jugar al hockey en Berlín, en el club Zehlendorf 88. Es estudiante de Derecho, vive en Hamburgo y juega en el club Uhlenhorster HC, ocho veces campeón de Alemania. La pandemia del coronavirus y el aplazamiento de los Juego Olímpicos son muy duros para ella, dice Micheel, porque se dio cuenta de lo importante que es la interacción social. “La vida en el club y estar con la selección nacional son las cosas que más eché de menos”.