Disfrute sensato de la naturaleza
Pasión por viajar, conservación de la naturaleza y economía en armonía: Alemania promueve el turismo sostenible en todo el mundo. Tres ejemplos:
KaZa: Conservación de la naturaleza en África
La belleza de la naturaleza está detrás de una sigla: KaZa TFCA, que significa "Kavango Zambezi Transfrontier Conservation Area". En el sur de África surge una de las reservas naturales más grandes del mundo, con 36 áreas protegidas y parques nacionales en Angola, Zambia, Zimbabue, Botsuana y Namibia. Los principales objetivos del proyecto KaZa son el desarrollo sostenible del turismo y la economía de esos países, así como la preservación de la biodiversidad. Por encargo del Ministerio de Cooperación Económica y Desarrollo (BMZ) de Alemania, el banco KfW Entwicklungsbank apoya como mayor donante el desarrollo de KaZa, con un aporte de 35,5 millones de euros. Y con valiosos efectos. Por ejemplo, los operadores de albergues en la región atribuyen particular importancia a la protección de la fauna salvaje, la cual a su vez fascina a los turistas.
Turismo sostenible a orillas del Danubio
Diez países. Ningún otro río en el mundo conecta tantas naciones como el Danubio. El río nace en la Selva Negra alemana y desemboca en el Mar Negro, en la región fronteriza entre Rumania y Ucrania. Pero mientras que la Selva Negra o las metrópolis de Viena y Budapest atraen desde hace mucho tiempo a viajeros de todo el mundo, la región central y baja del Danubio se beneficia aún relativamente poco del turismo internacional. El Danube Competence Center (DCC), con sede en Belgrado, desea cambiar esto. Junto con la Sociedad Alemana para la Cooperación Internacional (GIZ), como principal socio, el centro apuesta por el turismo sostenible. Un aspecto central es el fortalecimiento de la red ferroviaria, sendas de ciclismo y excursiones en barco, como alternativas ecológicas al automóvil.
Turismo con valor agregado en Marruecos
Marruecos es un país rico en naturaleza en estado puro y paisajes singulares. La GIZ fortalece la promoción del turismo en la montañosa región de Beni Melal-Jenifra y en Sus-Masa, en la costa atlántica. No solo se trata de la protección del medio ambiente, sino también de generar oportunidades de empleo y fuentes de ingresos para la población rural. El proyecto espera ofrecer una perspectiva especialmente a mujeres y jóvenes. Está previsto que al menos 5000 personas reciban capacitación en turismo sostenible, y que 20 nuevos albergues y la comercialización de productos locales ayuden a promover el turismo de la región.