Núremberg - signada por la historia

Sr. Maly, ¿qué caracteriza a su ciudad?

Hay tres huellas genéticas muy diferentes que han signado la ciudad de Núremberg. En primer lugar, la ciudad imperial medieval de Núremberg, en segundo lugar, la revolución industrial y, en tercer lugar, la era nazi con la plaza de los desfiles con motivo de los congresos del partido nazi y los juicios de Núremberg. Con esas contradicciones vive ahora y vivirá en el futuro la ciudad.

¿Qué ve cuando mira a través de la ventana de su oficina?

La iglesia y la plaza de San Sebaldo, el Museo Municipal Casa Fembo (Stadtmuseum Fembohaus) y la parte del castillo de Núremberg en la que ondea la bandera de la ciudad.

¿Cuál es su lugar preferido en la ciudad?

El Patio de la Crucifixión (Kreuzigungshof) en el Hospital del Espíritu Santo (Heilig-Geist-Spital) es un interesante lugar para descubrir. Es un oasis de paz y ambiente histórico en medio del animado casco antiguo.

¿A qué personalidad de su ciudad estima usted más?

Hay muchas. Yo creo que deberíamos rendir homenaje a todas esas personas de la política, la economía y la sociedad que, de una ciudad totalmente destruida, lograron hacer una ciudad nueva y con alta calidad de vida.

¿Qué lugar le mostraría a un visitante?

Le mostraría el distrito de Gostenhof, porque es una parte de Núremberg muy viva, y porque allí la ciudad de la época de la industrialización convive con el actual crisol de culturas.

¿Cómo puede conocerse mejor a los habitantes de su ciudad?

En el Plaza Central (Hauptmarkt) durante las compras.

¿Dónde le gusta pasar sus vacaciones?