Moda made in Germany
La moda made in Germany se presenta internacional.
Los jóvenes diseñadores tienen sus propias marcas en Berlín y se han ganado renombre también a nivel internacional: Hoai Vo, Tutia Schaad, Thuy Duong Nguyen y Hien Le. Comparten un origen familiar similar, de Vietnam o de la vecina Laos. Los cuatro modistas nacieron entre 1979 y1986 y se criaron en Bélgica, Suiza y Alemania. Sus padres emigraron a Europa. El estilo de los cuatro no podría ser más diferente. Mientras que el distintivo de Thuy Duong Nguyen, criado en Bischofswerda, Alta Lusacia, son las abigarradas telas de Sapa, tradicionales de Vietnam, Hoai Vo trabaja sobre todo con técnicas de origami, en las que pliega blusas y faldas hasta convertirlas en pequeñas obras de arte. También con elementos opuestos trabaja Tutia Schaad. La marca de esta diseñadora y de su socia Johanna Perret propone líneas escultóricas y angulares, con inusuales combinaciones de colores y materiales. Fusionar lana y laca no es algo fuera de lo común para estas dos diseñadoras. Hien Le, nacido en Laos y criado en Berlín, apuesta por líneas simples y materiales de alta calidad.
Además de estas influencias asiáticas también diseñadores de origen africano se han consolidado en el ambiente alemán de la moda. Por ejemplo Arrey Kono. La artista afro-italiana vive desde hace muchos años en Berlín y tiene una tienda en los Hackesche Höfe, el tradicional centro creativo de Berlín. Sus creaciones son extravagantes, pero cómodas para usar. Experimenta con telas de calidad superior y materiales no convencionales y ya marca tendencias en la moda internacional. Sus colecciones están disponibles en muchos países del mundo.
También Liebeskind Berlin atraviesa una fase de éxito y expansión internacional. Este joven sello de modas se ha consolidado en Alemania como popular marca de bolsos. En 2002, Johannes Rellecke con su hermano mellizo y un compañero de estudios, Semih Simsek, fundaron esta empresa. Hoy Liebeskind es considerado "el milagro alemán del bolso". Las colecciones se pueden adquirir ya en 1600 tiendas de 22 países, de Múnich a Kitzbühel y de Barcelona a Nueva York o Dubái. El fabricante de ropa de Franconia S. Oliver participa como inversor. Además de bolsos y accesorios, hoy Liebeskind también produce indumentaria y calzado.
