Merkel celebra acuerdo COP21
El acuerdo climático logrado en París es "señal de esperanza" destacó la canciller alemana.
París (dpa) - La canciller alemana, Angela Merkel, celebró el acuerdo para la protección del clima global logrado en la conferencia internacional COP21 de las Naciones Unidas y lo calificó de "señal de esperanza". "Con el acuerdo firmado hoy se compromete por primera vez la totalidad de la comunidad internacional a actuar, a pasar a los hechos en la lucha contra el cambio climático global", señaló la canciller el sábado en Berlín. "Mas allá del hecho de que tenemos mucho trabajo por hacer, esto es una señal de esperanza de que podemos asegurar también en el futuro las condiciones de vida de miles de millones de personas", agregó.
París fue escenario este sábado de un hecho histórico: por primera vez casi todos los países del planeta lograron sellar un acuerdo climático vinculante en la conferencia internacional COP21 de la ONU en la capital francesa. El anuncio del acuerdo por parte del ministro de Relaciones Exteriores francés, Laurent Fabius, tras dos intensas semanas de negociaciones despertó un largo aplauso de los delegados de países de todo el mundo, que se pararon de sus asientos y se abrazaron. El secretario general de las Naciones Unidas, Ban Ki-moon, se refirió a un "éxito monumental para los pueblos del planeta". La meta central de los 195 países es limitar el calentamiento global causado por los gases de efecto invernadero claramente por debajo de los dos grados centígrados, y de ser posible, incluso a 1,5 grados, tal como solicitan los pequeños estados insulares. De todas maneras, las metas nacionales del clima seguirán siendo determinadas por cada Estado en particular y hasta ahora los planes presentados no alcanzan para limitar el cambio climático según lo previsto.
Numerosos defensores del medio ambiente consideraron que el texto del acuerdo es una "fuerte señal" para que se dejen de utilizar combustibles fósiles: carbón, petróleo y gas. Sin embargo, señalaron que habrían deseado que se hubiera actuado antes y también más compromisos concretos para los diferentes países en particular. A diferencia del Protocolo de Kyoto, la reducción de los gases de efecto invernadero será a futuro tarea de todos los países y no solamente de los industrializados. El acuerdo será abierto para la firma de países individuales a partir de abril próximo en las oficinas centrales de las Naciones Unidas, pero no entrará en vigencia hasta que se produzca la ratificación de 55 países que sean responsables de al menos 55 por ciento de las emisiones de gases de efecto invernadero. La ministra alemana de Medio Ambiente, Barbara Hendricks, destacó que a partir de 2020 los países presentarán cada cinco años sus planes para proteger el medio ambiente, "que deben ser lo más ambiciosos posible". Además cada país deberá reportar sobre sus emisiones de gases de efecto invernadero, "para que los avances no estén solamente sobre el papel, sino que también se correspondan con la realidad".