“La convivencia es mejor en un buen vecindario”

Su profesión es promover el entendimiento entre los pueblos: unir a las personas, eliminar prejuicios y superar fronteras que no solo están en los mapas, sino también en la mente de las personas. Petra Ernstberger y Tomáš Jelínek son los gestores del Fondo de Futuro Germano-Checo, fundado en 1997: un liderazgo binacional compartido. Su trabajo está financiado por los Ministerios de Asuntos Exteriores de Alemania y Chequia. Hemos hablado con ellos.  

¿Cuáles son los objetivos del Fondo de Futuro Germano-Checo? 

Petra Ernstberger: Nuestro propósito es fortalecer y revitalizar la convivencia entre Alemania y Chequia. Para lograrlo, promovemos e impulsamos proyectos conjuntos en diversas áreas. Por ejemplo, la cultura en toda su diversidad. Ofrecemos foros de diálogo donde alemanes y checos pueden debatir temas de interés común. La educación también es un pilar fundamental para nosotros, desde programas de idiomas en las escuelas hasta becas universitarias. 

¿A qué retos se enfrenta en su trabajo? 

Tomáš Jelínek: Hace 20 años, los prejuicios representaban uno de los mayores desafíos históricos. Hoy en día, son otros temas los que dividen a nuestras sociedades, como la gestión del cambio climático, por ejemplo. Ahí es donde se centra el aspecto más importante de nuestro trabajo: nunca debemos perder de vista la importancia del diálogo. Por eso estamos creando espacios donde personas de Alemania y Chequia puedan reunirse, intercambiar ideas y encontrar inspiración. De este modo queremos combatir la indiferencia y el desinterés. 

¿Por qué es tan crucial mantener una buena vecindad?  

Tomáš Jelínek: La convivencia es mejor en un buen vecindario. Los vecinos pueden apoyarse, ampliar sus horizontes y enriquecerse mutuamente. Y muchas cosas son mejores cuando se hacen juntas. Cuando un grupo alemán da un concierto en Praga, los habitantes de ambos países bailan y lo celebran juntos. Eso es vecindad. Y no sólo eso: los desafíos globales también se superan mejor cuando se afrontan juntos. Juntos somos más fuertes.    

¿Cuál es el proyecto que más le apasiona? 

Petra Ernstberger:  Siento un vínculo emocional especial con el programa “Un año en la frontera”. En la actualidad se celebra por tercera vez: ocho alemanes y checos recorren la frontera durante un año, ejerciendo de “embajadores” para derribar barreras. Ellos trabajan de manera cercana, conectando directamente con las personas y uniéndolas.