Mujeres en las Naciones Unidas
Ursula Müller es la alemana de más alto rango en la ONU. Las mujeres están subrepresentadas en cargos directivos de la ONU. Se espera que esto cambie.
Cuando Kofi Annan dejó su cargo en 2006, deseó una mujer para su sucesión. Pero no fue así: el coreano Ban Ki-moon asumió como Secretario General de las Naciones Unidas y permaneció allí durante diez años. Después, António Guterres ocupó el piso 38 del edificio de la ONU en Nueva York, una organización mundial de 73 años de antigüedad con nueve hombres en los puestos jerárquicos más elevados. Los cargos más importantes de la ONU siguen en manos de hombres.
Asamblea General de la ONU "preocupada" por la baja cuota de mujeres
También en los dos niveles inferiores predominan los hombres: a principios de 2017 suponían más del 70 por ciento. Y esto pese a que la Asamblea General desde 1990 viene expresando reiteradamente su "preocupación" por la baja proporción de mujeres.
Además del principio de equidad, existen razones políticas tangibles para una mayor proporción de mujeres: las misiones de mantenimiento de la paz son más sostenibles cuando hay más mujeres participantes. Algo parecido sucede en materia de desarrollo.
Objetivo: paridad de género en la ONU hasta 2028
La consultora McKinsey ha estimado que el crecimiento económico mundial podría aumentar en un once por ciento anual si las mujeres estuvieran mejor integradas en la vida laboral. Por eso, para una organización comprometida con la igualdad de derechos, esto es más que una mera cuestión aritmética. Guterres ha declarado la "paridad de género" como objetivo para todo el sistema de la ONU hasta 2028.
Ursula Müller apuesta por la igualdad de derechos
En los últimos diez años, Alemania ha estado representada casi siempre por una mujer en el nivel inferior al Secretario General: primero con Angela Kane, quien hasta su retiro fue responsable del tema desarme, y desde 2017 con Ursula Müller, como Secretaria General Adjunta para Asuntos Humanitarios.
Müller es, junto al director del programa de desarrollo, Achim Steiner, el alemán de más alto rango en el sistema de la ONU. Cuenta con más de 30 años de experiencia internacional, entre otros en el Banco Mundial, el Ministerio Federal de Relaciones Exteriores y el Ministerio de Desarrollo.
También ella considera necesario dar prioridad a la igualdad de derechos: "En la ONU estamos claramente rezagados". Ahora es importante apoyar aún mejor a las mujeres, "a fin de que puedan avanzar y asumir más responsabilidades directivas". Müller no ve un peligro de retroceso en el ascenso del populismo. "Estoy segura de que los partidarios de la igualdad de derechos y de la diversidad son mucho más fuertes y prevalecerán".