Ir al contenido principal

Las ciudades esponja desafían al cambio climático

La escasez de agua durante los veranos calurosos obliga cada vez a más ciudades a idear soluciones innovadoras: una de ellas es el principio de la esponja. 

Laura PuttkamerLaura Puttkamer , 22.05.2024
Ocho kilómetros de setos: edificio en Düsseldorf
Ocho kilómetros de setos: edificio en Düsseldorf © picture alliance / Jochen Tack

Cada vez más ciudades utilizan el sencillo principio de una esponja para combatir la escasez de agua y aumentar su resiliencia climática: almacenan el agua de lluvia durante los períodos de grandes precipitaciones. Así evitan o alivian las inundaciones y el agua está disponible para el riego y la refrigeración durante los calurosos meses de verano.  

A nivel mundial, todavía no hay muchas ciudades esponja. Entre ellas se encuentran algunas ciudades de Alemania, incluida Berlín, que se ha fijado este objetivo. Para aplicar el concepto de ciudad esponja son necesarias tres medidas: infraestructuras verdes, azules y grises. 

Combinación de infraestructuras verdes, azules y grises 

La infraestructura verde incluye fachadas verdes como la del edificio Kö-Bogen-2 de Düsseldorf, así como parques y tejados ajardinados, que están en auge en Alemania. En 2021, casi el 10 % de las superficies de los tejados de nueva construcción en Alemania estaban ajardinadas. En Múnich existe un nuevo concepto de ciudad esponja que combina y pone en práctica espacios verdes, plantación de árboles, grandes zanjas para plantar árboles en las calles y tejados ajardinados en un solo concepto. 

La infraestructura azul está directamente relacionada con el agua: pozos de infiltración, lagos artificiales, humedales con praderas inundables y cuencas de retención de agua. El ecobarrio de Pfaffenhofen, en el sur de Alemania, es un ejemplo de cómo puede conseguirse la desobstrucción en una zona residencial. En la actualidad, el agua de lluvia discurre por los canalones de las calles hacia cisternas y pozos de infiltración, así como hacia el renaturalizado río Ilm.  

Las infraestructuras grises se refieren a estructuras como las arquetas, las cisternas y los revestimientos de suelo permeables al agua, como los pavimentos con juntas. En Berlín, las nuevas zonas urbanizadas deben garantizar que la mayor parte del agua se filtre, se almacene o se evapore. En el parque tecnológico y la zona residencial de Adlershof, por ejemplo, no hay desagües al alcantarillado, sino zonas verdes de infiltración. Los caminos también son permeables al agua. 

El concepto de ciudad esponja requiere un replanteamiento y un intercambio entre distintas disciplinas. No obstante, este enfoque relativamente sencillo de la resistencia al cambio climático es cada vez más popular. Al fin y al cabo, las ciudades esponja tienen muchas ventajas para las personas, tanto en épocas de sequía como de inundaciones.